José Luis Barrio Moya.
Instituto de Estudios Madrileños.
Muchos años antes de que Felipe II eligiera en 1561, a Madrid como capital de su Monarquía, la villa castellana tenía a sus espaldas una larga historia, que con relativa frecuencia ser ha querido obviar. En efecto a lo largo de la baja Edad Media se asentaron en Madrid importantes familas que no solamente se hicieron con los más altos cargos del gobierno municipal sino que también levantaron iglesias y palacios. Sin embargo muy poco es lo que en Madrid se ha conservado de los edificios erigidos durante los siglos XIV,XV y XVI – alguna torre mudéjar o la muy restaurada nave de la iglesia de los Jeerónimos – antes de que la decisión real la convirtiera en la capital de un enorme imperio. No obstante, y de manera casi inexplicable, ha llegado hasta nuestros días una de las obras más suntuosas del renacimiento castellano: la capilla de Santa María y San Juan de Letrán, más conocida como la del obispo de Plasencia, don Gutierre de Vargas y Carvajal, que lo fue la diócesis placentina entre 1524 y 1559, año de su muerte.
Don Gutierre de Vargas y Carvajal nació en Madrid en 1506. Fueron sus padres el hidalgo madrileño don Francisco de Vargas, hombre de entera confianza de la Reyes Católicos y del emperador Carlos V, y la señora extremeña doña Inés de Carvajal, perteneciente a una familia muy afecta a la monarquía castellana, como asi lo demuestra el hecho de que su padre, don Francisco de Carvajal fuera el principal artífice de que en 1488, Plasencia se incorporase a la corona de Castilla.
Don Gutierre de Vargas y Carvajal fue el segundón de la familia, lo que determino su destino , como era costumbre de la época, en la carrera eclesiástica. El destacado papel que don Francisco de Vargas tenía en la Corte, allanó el camino para que su hijo ocupara, desde muy joven altos cargos en la Iglesia. En 1519, don Gutierre de Vargas y Carvajal ya gozaba de una canonjía en la catedral de Toledo, siendo a la vez de abad de Santa Leocadia.
El 25 de mayo de 1524, y cuando solamente contaba con diez y ocho años de edad, don Gutierre de Vargas y Carvajal, fue promovido para ocupar el obispado de Plasencia , vacante por la muerte, en 1523,de su titular hasta entonces don Bernardino López de Carvajal. Pero el flamante prelado placentino tenía más aficion a la vida mundana, incluida la militar, que la religiosa, lo que fue causa, desde el comienzo de su gobierno en la sede extremeña, de muy serios enfrentamientos con los miembros del cabildo. Su vida licenciosa era motivo de escádalo, complicada aún más por sus aficiones bélicas, que se manifestaron en su intervención en los conflictos surgidos entre las familias de los Carvajal y Zúñiga por hacerse con el señorio de Plasencia. Como ejemplo de su poca edificante existencia hay que reseñar al hijo nacido de las relaciones de don Gutierre de Vargas y Carvajal con la señora toledana doña María de Mendoza, emparentada con los marqueses de Almazán (1).
Durante muchos años el obispo de Plasencia siguió llevando una vida poca acorde con sus cargos eclesiásticos, que en nada se diferenciaba de la de muchos cardenales italianos de la época. Pero un acontecimiento histórico de gran envergadura, cambió radicalmente la errática existencia de don Gutierre de Vargas y Carvajal, su asistencia al Concilio de Trento. El 23 de diciembre de 1550 el emperador Carlos V remitió desde la ciudad alemana de Augsburgo una carta al obispo de Plasencia pidiéndole su presencia a la magna asamblea religiosa. Pero aquella oferta fue rechazada por don Gutierre de Vargas y Carvajal por encontrarse enfermo. Sin embargo en 1551, el obispo de Plasencia ya se encontraba en la ciudad italiana, donde conoció a los jesuítas Diego de Laynez y Alfonso de Salmerón, leyendo durante su estancia alli los Ejércicios espirituales, de San Ignacio de Loyola. Aquellas experiencias cambiaron la vida del prelado placentino que, a partir de entonces fue ejemplar. De regreso a Plasencia fundó en aquella ciudad un colegio de jesuítas, dedicado a formar sacerdotes qu tuvieran la educación necesaria para enfrentarse a la reforma luterana. Desde Plasencia don Gutierre de Vargas y Carvajal se trasladó a Madrid, donde enfermó de gota gravemente, por lo que pasó a la villa cacereña de Jaraicejo, perteneciente a los obispos placentinos, para recuperar la salud, ocurriendo todo lo contrario, puesto que falleció en ella el 27 de abril de 1559, siendo sus restos depositados en un principio, en la iglesia de Torrejón el Rubio. En 1560, y cumpliendo su deseo testamentario, el cuerpo del obispo de Plasencia fue traido a Madrid para ser sepultado en la capilla de Santa María y San Juan de Letrán, fundada por su padre y que el convertiría en panteón familiar.
La capilla de Santa María y San Juan de Letrán fue fundada en 1520,por don Fernando de Vargas para guardar en ella el cuerpo de San Isidro, custodiado hasta entonces en la vecina iglesia parroquial de San Andrés. Pero el empeño de don Francisco de Vargas chocó frontalmente con la fuerte oposición que a su proyecto interpuso el párroco de San Andrés. Pero no era el padre del obispo de Plasencia persona que se amilanase ante las dificultades, recurriendo para conseguir sus desinios hasta al papa León X, quien autorizó el traslado de los restos de San Isidro a la nueva capilla. Don Fernando de Vargas falleció en 1523, sin haber logrado ver concluida su capilla, cosa que llevó a cabo su hijo en 1535.
Los restos del patrón de Madrid permanecieron en la capilla de los Vargas hasta 1544, año en que regresaron a su primitivo emplazamiento en San Andrés. El motivo de este nuevo trasiego fue la denuncia del párroco de la iglesia ante el cardenal Tavera, arzibispo de Toledo, de las constantes disputas entre los oficiantexs de misas de la parroquia y la capilla. También se consiguiió que la puerta que comunicaba ambos recintos sagrados fuera tapiada, para que no hubiera ninguna relación entre ellos. Quedó entonces la capilla vacia de contenido, por lo que don Gutierre de Vargas y Carvajal decidió convertirla en panteón familiar, donde depositar los restos de sus padres y los suyos propios.
La capilla del Obispo de Plasencia se encuentra en la madrileña Plaza de la Paja y constituye uno de los escasos restos de arquitectura del gótico final en la villa y Corte. Consta de una sola nave con el coro a los pies y cubrimiento de bóvedas de crucería, cuyas claves aparecen adornadas con los escudos de los Vargas. El ábside, de cinco lados, lleva pilares góticos finamente trabajados (2).
Don Gutierre de Vasgas y Carvajal dotó a su capilla funeraria de un soberbio retablo, de madera, y de los sepulcros de sus padres y de él mismo, realizados en alabastro, que constituyen una de las obras más suntuosas del renacimiento español. Todas aquellas obras fueron encargadas a Francisco Giralte, discipulo de Alonso de Berruguete, quien inició los trabajos en 1547,
El retablo de la capilla del Obispo se adapta perfectamente al ábside de la capilla, y presenta en la entrecalles, figuras de apóstoles, padres de la Iglesia y santos, mientras que en los cuerpos principales se desarrollan escenas de la infancia y Pasión de Cristo. Todas las esculturas tienen claros ecos del estilo de Alonso de Berruguete aunque algunas figuras en sus proporciones, en la corrección, en la talla, evocan algunas características derivadas de Siloé, quiza fruto de una misma formación italiana, que fundamenta el predominio del idealismo en las formas sin alcanzar el extraordinario expresivismo de los maestros vallisoletanos (3).
A ambos lados del retablo se encuentran, bajo sendos arcosolios y en actitud arrodillada, las figuras de los padres de don Guetierre de Vargas y Carvajal, minuciosamente trabajadas y todo ello decorado con el repertorio ornamental del mejor renacimiento castellano. Pero lo más importante que conserva la capilla del obispo nada puede hacer sombra al magnífico sepulcro de don Gutierre de Vargas y Carvajal, situado en el lateral de la epístola. Obra sorprendente, ejecutada con un virtuosísmo que raya en la perfección, pero algo confusa en su composición y exuberancia decorativa. Aparace el prelado arrodillado ante un reclinatorio y acompañado por su capellán mayor, el licenciado Barragán y dos acólitos vestidos con sobrepellices. El encuadramiento es un arco de medio punto flanqueado por dobles columnas jónicas y estriadas, y todo decorado con multitud de figurillas formando un conjunto único, obra maestra del escultura funeraria española del siglo XVI (4).
Francisco Giralte nació en Palencia en 1510. Díscipulo de Alonso de Berruguete, trabajó con su maestro en la sillería superior del coro de la catedral de Toledo. Artista muy prolífico, realizó numerosos retablos, entre ellos los de las iglesia de Cisneros y Villamentero de Campos, asi como el de la capilla del doctor Corral en la Magdalena de Valladolid, tal vez su obra mas personal. A causa de un pleito con Juan de Juni por la adjudicación del retablo de Nuestra Señora de la Antigua , que ganó el francés, Giralte se trasladó a Madrid, siendo requerido por don Gutierre de Vargas y Carvajal para las obras de su capilla. Intervino también Giralte en el retablo de la localidad segoviana de El Espinar, falleciendo en Madrid en 1576 (5).
El retablo y los sepulcros de la capilla del obispo han gozado siempre de muy buena prensa. Asi Jerónimo de la Quintana calificaba la tumbra de don Gutierre de Vargas y Carvajal, de suntuosa, apostillando que las figuras del tan natural de sus originales, que parece quiere competir el arte con la naturaleza en el primor dellas (6).
Se debe al ilustrado Antonio Ponz no sólo una minuciosa descripción del retablo y sepulcros de la capilla del obispo, sino también el acertar con el autor de aquella obras. Francisco Giralte,. por papeles de su archivo. Más atento al retablo que a los enterramientos, afirma del primero que se debe reputar entre los que más trabajo de escultura tienen en España y por de lo mejor que aquí se hacia a principios del siglo XVI (7). Por su parte Álvarez y Baena no duda en calificar el retablo como el de la mejor escultura que tiene España (8). Tampoco ahorraron elogios al retablo y sepulcros de la capilla madrileña Pascual Madoz y Ramón de Mesonero Romanos, y mucho menos Elías Tormo quien califica los enterramientos de ricos y suntuosos y de mayor gentileza, por su más delicada unidad arquitectónica y de toda la composicón (9).
Desgraciadamente, y desde hace ya muchos años, la capilla del obispo de Plasencia permanece inivisible al píblico, ignorándose cuando se abriran las puertas de uno de los recintos sacros de Madrid, que tiene el honor de guardar en su interior una de las muestras más señeras del renacimiento hispano.
Pero la generosidad de don Gutierrre de Vargas y Carvajal con su capilla fue más alla de costear retablo y sepulcros, puesto que también donó a la misma toda una rica serie de objetos de plata y ropas litúrgicas de gran valor, para que el culto divino se celebrase con el mayor esplendor. Sin embargo el paso del tiempo y de la historia hicieron desaparecer muchos de aquellos regalos, aunque algunos todavía se conservaban en una fecha tan tardia como 1661, año en que se hizo un minucioso inventario de todos los objetos que aún se guardaban en la mencionada capilla.
El 11 de enero de 1661 y ante el escribano Jerónimo de la Flor, fray Martín García, sacristán nayor de la iglesia de San Andrés declaraba que el presbitero Andrés González, natural de la localidad conquense de Villanueva de la Jara, entraba a servir desde oy dia de la fecha desta scriptura el oficio de sacristan mayor de la capilla de Nuestra Señora y San Juan de Letran que llaman del señor obispo de Plasencia, que esta junto a la parroquia de San Andres, y por lo que le an de entregar todos los ornamentos, bestuarios, alaxas de plata y otras cosas tocantes y pertenecientes del servicio de dicha capilla y sacristia(10).. Actuaron como fiadores de Andrés González, el ya citado fray Martín García y Francisco Cano, sacristán mayor de la iglesia de San Andrés.
Una vez que se realizó el inventario de los bienes de la capilla fueron entregados al nuevo sacristán por el capellán mayor de la misma, don Luis Méndez, mientras que los fiadores de Andrés Gonzaléz se comprometían a que de todo ello tendrian que dar cuenta y raçon de todo el dia que se le pidiese quenta o hiciese dejacion de dicha sacristia y si algo faltare lo an de pagar lo que valiese al dicho capellan mayor que es o fuere con solo esta escriptura sin otro ynstrumento alguno.
El día 13 de enero de 1661, y ante el ya mencionado escribano Jerónimo de la Flor, el flamante sacristán mayor de la capilla del obispo, confesaba los objetos de culto de la misma que le entregaba el licenciado Luis Méndez, capellán mayor de ella (11).
Entre los bienes registrados se encontraban numerosas piezas de plata, tales como cruces, candeleros, cálices, patenas, platos, portapaces, ciriales, incensarios. acetres y custodias. Se contabilizaban también varios misales, unos impresos en Amberes y otros en Madrid, asi como numerosos textiles : bolsas de corporales, cortinas, tafetanes de cálices, albas, amitos, roquetes, casullas, frontales de damasco y terciopelo, capas, alfombras, etc. Había asimismo algunos muebles, arquillas, braseros, atriles, bancos y mesas y dos cuadros, una Resurrección y una María Magdalena no registrados por Ponz.
De las pertenencias que don Gutierra de Vaergas y Carvajal donó a su capilla todavía se conservaban en 1661, unos zapatos de raso morado del señor obispo y de sus regalos un terno de damasco blanco, rico y bordado de oro con las armas del señor obispo, casulla, dos estolas y tres almaticas, collares, manipulos, todo aforrado en bocaci açul con su capa y frontal y paño de facistol de lo mismo.
En la actualidad nada de lo reseñado en el inventario de 1661 se conserva en la capilla del obispo de Plasencia
NOTAS.-
(1).- Un buen trabajo sobre el obispo de Plasencia es el de Asunción Fernández Hoyos.- El obispo Don Gutierre de Vargas, un madrileño del Renacimiento,Madrid, Caja Madrid, 1994.
(2).- Para todo lo relacionado con la capilla del obispo de Plasencia véase José María de Azcárate y Ristori.- La Capilla del Obispo en la iglesia de San Andrés,Madrid, Aula de Cultura, nº.7, Instituto de Estudios Madrileños. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1971.
(3).- José María de Azcárate y Ristori.- Escultura del siglo XVI , Ars Hispaniae, Vol. XIII, Madrid, edit. Plus Ultra, 1958, pág. 191.
(4).- Vid. María José Redondo Cantera.- El sepulcro en España en el siglo XVI. Tipología e iconografía, Madrid, Ministerio de Cultura, 1987.
(5).- José María Caamaño Martínez.- “Francisco Giralte” en Goya, nº. 76, 1967, págs. 230-239.
(6).- Jerónimo de la Quintana.- A la muy antigua, noble y coronada villa de Madrid. Historia de su antigüedad. nobleza y grandeza, Madrid 1629, pág. 73 vltª.
(7).- Antonio Ponz.- Viaje de España, Tomo V, 3ª ed., Madrid 1793, pág. 113.
(8).- José Antonio Álvarez y Baena.- Compendio histórico de las grandezas de la coronada villa de Madrid, Madrid 1786, pág. 82.
(9).- Elías Tormo.- Las iglesias del antiguo Madrid, Madrid, Instituto de España, 1972, pág. 45.
(10).- Archivo Histórico de Protocolos de Madrid. Protocolo = 8523, folº. 14-14 vltº. Ver documento 1º.
(11).- Archivo Histórico de Protocolos de Madrid. Protocolo = 8523, folº. 15-20. Ver documento 2º.
DOCUMENTO 1º.-
Fiança el lizenciado Andres Gonzalez.
en 11 de henero de 1661.
En la villa de Madrid a onçe dias del mes de henero año de mill y seiscientos y sesenta y uno ante mi el escribano y testigos parecieron el lizenciado Andres Gonzalez y el lizenciado Alonso Castillejo presbiteros, vecinos y naturales de Villanueva de la xara, obispado de Cuenca como principales y el lizenciado Martin garcia presvitero y Francisco cano, sacristan mayor de la parroquia de señor San Andres como sus fiadores y llanos pagadores, haciendo como hacen de deuda y casso suio propio, sin hacer excusion en los vienes de los principales y a mayor abundamiento juntos i de mancomun, a voz de uno y cada uno de por si ynsolidum, tenidos y obligados, renunciando como renunciaron las leies de la mancomunidad como en ellas se contiene = y dijeron que por quanto el dicho lizenciado Andres Gonzalez entra a servir desde oy dia de la fecha desta escriptura el oficio de sacristan mayor de la capilla de Nuestra Señora y San Juan de Letran que llaman del señor obispo de Plasencia, que esta junto a la parroquia de señor San Andres y por que le an de entregar todos los ornamentos, bestuarios, alaxas de plata y otras cosas tocantes y pertenecientes del servicio de dicha capilla y sacrestia por el capellan mayor y capellanes de ella = y ahora en la mejor via y forma que mejor aia lugar en derecho, otorgan a que todo lo que se le entregare por inbentario firmado por el dicho lizenciado Andres Gonzalez daran quenta y raçon de todo el dia que se le pidere quenta o hicere dejacion de dicha sacrestia, y si algo faltare lo an de pagar, lo que valiere, al dicho capellan mayor que es o fuere con solo esta escriptura sin otro ynstrumento alguno con pena de execucion y costas de la cobrança = y si para qualquier cosa, aparte de lo contenido en esta escriptura, fuere necesario ynviar persona fuera desta Corte contra los dichos otorgantes y sus vienes a donde quisiera que fueren hallados, con seiscientos maravedis de plata en cada un dia de los que en la cobrança se ocupare con mas la yda y buelta a esta Corte, contando los dias de camino a ocho leguas por dia y la ocupacion y trabajo en ella, desde luego lo dejan y difieren en su juramento y declaracion simple, sin otra prueba de que le relievan, los quales salarios pagaran sin embargo de las pregmaticas que los prohiben = y para que lo abran por firme obligan sus personas y vienes avidos y por aver, dieron poder cumplido a las Justicias y Jueces de Su Santidad, a cuio fuero y jurisdicion se sometieron y en especial al señor nuncio y vicario desta villa de Madrid y a cada uno ynsolidum, renunciaron su propio fuero y jusridicion y domicilio y la ley sit conveneridde jursidictione omniun judicum para que se lo agan cumplir como por sentencia pasada en cosa juzgada, renunciaron las leies de su favor con la general en forma = otrosi renunciaron el capitulo o duardus de seran penis de absolucionibus y todas las demas que ablan en su favor, en cuyo testimonio lo otorgaron asi, siendo testigos el lizenciado Juan de Cortazar, Antonio de Salas y Domingo Abarca residentes en esta Corte y los otorgantes a quien doy fee conozco lo firmaron.
el licdº. Andres Gonzalez de tevar. Alonso de Castillejo Gonzalez, lizdº. Martin Garcia Asenjo. Francisco Cano, Ante mi = Jeronimo de la Flor.
(ARCHIVO HISTÓRICO DE PROTOCOLOS DE MADRID.- Protocolo = 8523, folº. 14-14 vltº. Escribano = Jerónimo de la Flor).
DOCUMENTO 2º.-
en 13 de anero de 1661.
En la villa de Madrid a trece dias del mes de henero año de mill y seiscientos y sesenta y uno ante mi el escribano y testigos parecio el licenciado Andres Gonzalez de Tevar, presvitero, sacristan mayor nombrado de la capilla de Nuestra Señora y san Juan de letran que llaman del señor obispo de Plasencia, que esta junto a la parroquia de señor san Andres desta villa = y dijo que por quanto esta nombrado por tal sacristan mayor y entro a servir la sacristia de dicha capilla y se le entregaron las cosas de plata, ornamentos y ropa blanca y otras cosas y todo lo demas del servicio de la dicha capilla y sacrestia como vienes propios de ella para dar quenta con pago cada y quando que se le pida y fuere mandado, conforme a las fianças que tiene dadas en onçe dias deste presente mes de henero de mill y seiscientos y sesenta y uno ante mi el presente escrivano a favor del señor capellan mayor de dicha capilla y demas personas que son lexitimas a que se refiere = y los vienes que assi recivi y estan oy en su poder, que se los entrego el señor licenciado Luis Mendez capellan mayor de ella son los siguientes
– primeramente una cruz de plata, que es el guion llano.- yten otra cruz de plata con su pie redondo. acincelado y lo demas liso con su Christo.- mas un pixide de plata blanca para guardar el Santisimo Sacramento en el sagrario, es a modo de ostiario.- mas otras dos cruces de plata lisas por encima y el pie acinçelado.- mas seis candeleros de plata, los quatro de ellos mas altos que los dos, acinçelados.- mas otros dos candeleros de plata pequeños y llanos.- mas otros dos ciriales de plata grandes con sus basas de lo mismo.- mas un yncensario de plata con su naveta y cuchara de lo mismo.- mas una campanilla de plata con algunos relieves sobre dorados.- mas un portapaz de plata con la oracion del guerto.- mas una custodia de plata sobredorada donde se pone el santisimo sacramento con su caja negra.- mas quatro calices de plata, el uno dorado con sus esmaltes, con patena dorada, y los otros blancos con sus patenas.- mas dos platos de plata llanos, el uno mayor que el otro.- mas quatro vinajeras de plata blanca, sin coberteras.- mas un acetre de plata esquinado con su hisopo de lo mismo.- mas una cruz de vidrio esmaltada de açul y blanco con un Christo.- mas un aguamanil de bronce que esta en la sacristia.- mas dos campanillas de bronce, una mayor que otra para las misas reçadas.- mas un espexo grande que esta en la sacristia.- mas cinco misales, el uno grande de Antuerpia y los otros dos de Madrid llanos y otros dos viejos.- mas dos libros de los Evanjelios y epistolas para los diaconos.- mas un brebiario de marca mayor, nuevo, que esta en el coro con otros cinco libros grandes que estan en el estante de dicho coro.- mas quince bolsas de corporales, las quatro bordadas y las demas llanas, de diferentes colores con diez y siete corporales con sus hijuelas.- mas diez y seis tafetanes de calices de diferentes colores.- mas cinco tafetanes grandes de ombros, de diferentes colores.- mas se añaden otros dos tafetanes de ombros, verde y morado.- mas dos mangas de tafetan para el guion, una blanca y otra morada barreteada.- mas un doselico de tafetan para el guion con caydas de tabi que sirbe en el atril.- mas cinco albas, las dos con puntas y las demas llanas.- mas se an echo tres albas nuebas con puntas y seis amitos.- mas diez sabanas de altares.- mas quatro roquetes, los tres nuevos y el uno biejo.- mas quatro toallas, las dos de ellas con puntas.- mas seis amitos.- mas dos paños de manos largos que estan junto al aguamanil dde la sacrsitia.- mas una sobreplliz de lienço gordo que sirve al sacristan mayor.- mas catorce corna altares.- mas un terno rico de brocado, de tres altos, de ymagineria con sus fundas de cordellate blanco, que es casulla, almaticas con sus collares con una estola, seis manipulos con su frontal y frontaleras y capa de lo mismo.- mas un terno bordado, algo de morado alcachofado y amarillo, de tres altos, casulla y almaticas con sus collares, con una estola y manipulo, con fundas de cordellate blanco.- mas un terno de damasco blanco, rico y bordado de oro con las armas del señor obispo, casulla, dos estolas y tres almaticas, collares, manipulos, todo aforrado en bocaci açul con su capa y frontal y paño de facistol de lo mismo.- mas un forntal blanco de damasco con sus frontaleras y caydas que sirve al altar de san Francisco.- mas tres casullas de damasco blanco con cenefas de brocatel con sus estolas y manipulos.- mas dos almaticas del o mismo que sirven para las misas de Nuestra Señora los sabados con sus collares.- mas un frontalillo blanco de tela de oro con sus franjones de oro, con su funda blanca de cordellate que es el dio la señora marquesa de San Vicente patrona de la capilla.- mas tres frontales de catalufa con sus estolas y manipulos.- mas una manga blanca de cruz bordada.- mas tres palias que sirven de tabernaculo del santisimo sacramento, las dos de ellas negras con una cruz en medio y la otra blanca bordada donde esta pintado el Santisimo Sacramento.- mas otra palia de damasco blanco con una cruz que la atraviesa, de oro y tela que la dio la señora marquesa de San Vicente.- mas un terno de damasco colorado carmesi con faldones bordados, con su capa y paño de facistol y frontal de tela con frontaleras y caydas bordadas.- mas otro terno de terciopelo colorado con faldones de tela amarilla y capa de lo mismo con sus estolas y dos manipulos.- mas tres frontales, el uno de terciopelo colorado que sirv en el altar mayor y los otros dos de raso carmesi con unas listas blancas que sirven en los colaterales.- mas dos estolas de rasso carmesi, launa con su manipulo y la otra de terciopelo carmesi con su manipulo.- mas una casulla deraso carmesi con su cenefa de terciopelo colorado con su estola y manipulo.- mas dos frontales de brocatel con sus frontaleras de raso carmesi y caydas de ramos cortados con sus fluecos alrededor.- mas una casulla de tafetan colorado con cenefa bordada, con estola y manipulo.- mas una frontal de damasco colorado con sus frontaleras que sirven en el altar de San Francisco.- mas una manga colorada de raso carmesi bordada que servia a la cruz.- mas un terno de rasso bordado de oro con cenefa y faldones de raso carmesi tamvien bordadas, aforrado todo en raso dorado, sin estolas ni manipulos.- mas una capa de tafetan cerde con unos galones de plata con su capilla.- mas tres casullas, las dos de raso verde y la otra de terciopelo con cenefas de chamelote con sus estolas y manipulos.- mas un frontal de terciopelo verde con cenefas de terciopleo pardo pegadas al mismo frontal que sirve al altar mayor.- mas dos frontales delo propio que sirven a los colaterales.- mas una casulla de tafetan berde con su estola y manipulo que sirven en el altar de San Francisco.- mas un frontal de lo mismo con sus frontaleras y caydas que sirve al dicho altar.- mas una casulla de terciopelo açul fallada de estrellas, sin estola ni manipulo con su frontal de lo mismo, sin caydas. – mas una frontalera con sus caydas de raso açul celeste con unos ramos blancos y colorados y pajiços.- mas una frontalera con caydas. colorada y con dos escudos de armas, el uno de los Chacones y el otro de los Ayala.- mas un terno morado de damasco con cenefas de tela de oro amarillo con sus collares y la casulla guarnecida con pasamanos de plata con sus manipulo, sin estola.- mas dos casullas moradas de raso, viejas, con sus estolas y manipulos.- mas una capa de lo mismo de damasco y la capilla de terciopelo negro que es la que se quito de una de las capas negras porque no la tenia.- mas un paño de pulpito de pulpito de damasco morado con fluecos de oro y cenefas de lo propio.- mas un estolon ancho, morado para el tiempo de quaresma.- mas tres frontales dorados de terciopelo del altar mayor y colaterales con caydas de terciopelo naranjado.- mas una casulla de tafetan morado guanecida alrededor con flueco de seda con estola y manipulo que sirve al altar de San Francisco.- mas dos casullas de damasco morado con cenefas a tafetan doble de rasso seca con sus estolas y manipulos.- mas otra estola y manipulo de lo mismo.- mas un frontal de tafetan morado con frontaleras y caydas de lo propio que sirve al altar de San Francisco.- mas una casulla de tela de oro que tiene por cenefa la raiz de Jese, sin estola ni manipulo.- mas un terno de terciopelo negro con galones y guarnicion de terciopleo pardo y la casulla tiene la cenefa de raso amarillo.- mas tres frontales de raso negro con frontaleras de raso pardo para el altar mayor y colaterales.- mas una capa de raso negro con cenefa de terciopelo guarnecida con pasamanos de oro, su capilla es la que esta en la capa morada.- mas otro terno negro de chamelote de seda y oro y capa con su capilla bordada alrededor con calaberas, con su paño de facistol con la misma guarnicion.- mas dos casullas negras de tafetan doble con cenefas de tafetan doble morado con estola y manipulo la una y la otra sin ello.- mas un paño de pulpito de terciopelo negro.- mas otra casulla de tafetan negro, la cenefa bordada de blanco y pajiço con su estola y manipulo.- mas un frontal negro con flores amarillas, de chamelote con sus caydas de lo mismo.- mas un paño de facistol de tafetan negro con faldones de terciopelo negro.- mas un palio de tela de oro con quatro baras para quando sale el santisimo sacramento en procesion.- mas una mitra del señor obispo con su caja.- mas tres paños de monumento, de terciopelo negro con cruces de brocatel de oro guarnecidas alrededor con calaberas y guesos.- mas un cielo de damasco negro con el Sol y la Luna y las estrellas en medio.- mas una cortina de red que se pone delante del monumento.- mas un paño de bayeta negro que sirbe para la tumba quando ay aniversarios con quatro paños negros que se ponen alrededor de ella.- mas cinco paños de anjeo grandes pintados en ellos el testamento viejo y nuevo.- mas un paño grande de guadamacil plateado que sirve para las gradas del monumento.- mas siete alfombras, las dos de ellas clavadas en la capilla y las quatro de ellas sirven para el altar mayor y colaterales y otra pequeña donde se pone el frontal grande quando ay visperas cantadas.- mas otra vara con su arquilla con otra del guion con las quatro del palio son seis en todas.- mas una caxa de madera para las ostias con sus tijeras.- mas una arquilla aforrada con terciopelo negro adonde se encierra el santisimo sacramento de la semana santa.- mas otra arquilla de pino que esta en la alacena de la plata donde se guardan los corporales.- mas un brasero de cobre con su caja de madera y una mesilla de pino donde se pone cuando se enciende.- mas un caldero de cobre.- mas un bufete de nogal que sirve de credencia.- mas un atril de madera y dos de yerro para el altar mayor y colaterales.- mas seis candeleros de madera que sirven a dichos altares.- mas seis acheros, los quatro de madera y los dos de yerro.- mas un candelero grande pintado donde se pone el cirio pascual con su funda de anjeo.- mas una culebrina con su mechero para el sabado santo.- mas un triangulo donde se ponen las velas de las tinieblas.- mas una tumba y tablas para los aniversarios.- mas toda la madera del monumanto.- mas trece bancos que estan en la capilla para sentarse , los once de nogal y los dos de pino.- mas dos quadros que estan en la sacristia, el uno de la rresurreccion y el otro de la Madalena.- mas unos zapatos de raso morado del señor obispo.- mas tres almoadas de terciopelo morado para la semana santa.- mas dos cortinas de bocaci para los colaterales con sus barillas de yerro.- mas un pulpito de madera portatil sin chapitel,
De todos los quales dichos vienes contenidos en dicho ynventario el dicho lizenciado Andres Gonzalez se dio por contento y entregado a toda su voluntad por aberlos recibido con efecto y se obligo a dar quenta y raçon con pago, recta y berdadera de todos los dichos bienes y los entregara a dicho señor capellan mayor que al presente es o fuere de la dicha capilla luego que se lo pidan.
testigos = Diego de Arguello, Domingo Abarca y Bartolome Martinez Grande.
licenciado Andres Gonzalez de Tevar. Ante mi = Jeronimo de la Flor.
(ARCHIVO HISTÓRICO DE PROTOCOLOS DE MADRID.- Protocolo = 8523, folº. 15-20. Escribano = Jerónimo de la Flor).