Fernando Díaz Esteban.
Sumario:
- La situación general:
- La visión optimista de Méndez Silva:
- España,
- Extremadura,
- Análisis.
- La visión optimista de Méndez Silva:
- La visión pesimista de los arbitristas.
- Conclusión.
Cervantes da algunas pinceladas, gozosas y tristes, de la sociedad que le rodea, pero ¿cómo era su España para otros? Me ha parecido oportuno dar aquí una panorámica de cómo en el siglo XVII la veían diversos y contrapuestos autores.
I. La situación general.
En los Coloquios Históricos de Extremadura de 2002[1] presenté la situación económica de Extremadura durante el siglo XVIII como de extrema gravedad, así como los esfuerzos del cacereño Don José de Carvajal y Lancastre, Ministro de Estado de Fernando VI para mejorarla. Después suyo, diversos jefes militares de la región escribirán sus informes para atajar el agravamiento de la pobreza y la despoblación, progresivo hasta inicios del siglo XIX, exponiendo la situación a los sucesivos reyes. Igualmente, ofrecí atisbos de que en el siglo XVII ya había comenzado la decadencia económica en Extremadura: recordemos el deterioro de la agricultura por la invasión de la maleza del monte en los campos sin cultivo, la pugna de los agricultores con los ganados trashumantes de la Mesta y el abandono de las dehesas reales.
1. La visión optimista de Méndez Silva
Sin embargo, en el siglo XVII se quiere dar la impresión de que España es un país próspero y cargado de noble historia. Puede servir de ejemplo el libro de Rodrigo Méndez Silva, Población General de España[2]. Impreso en tiempos de Felipe IV, tuvo una segunda edición durante el reinado de Carlos II.
a. España
Para dar lustre al linaje español mantiene la creencia general en la época[3] de que después del Diluvio España fue poblada por Tubal, nieto de Noe y considera un timbre de honor el cristianismo de los españoles: aquí predicaron Pedro, Pablo y Santiago[4]. En la parte del libro titulada Breve Descripción de España con algunas de las grandezas y excelencias de que goza, en su capítulo primero describe los 19 reinos y provincias, que son Castilla, León, Toledo, Extremadura[5], Bética (Córdoba, Jaén, Sevilla y Granada), Aragón, Portugal, Algarbe, Navarra, Valencia, Galicia, Murcia, Vizcaya, Alaba, Guipúzcoa y Cataluña.
Es una delicia leer las bendiciones de que según su autor gozaba nuestro país: Cielo templado, abundantíssima en todo genero de ganado, quesos, mantecas, carnes sabrosíssimas: carnero, puerco, cabrito, vaca, ternera, y abundancia de cereales: mucha cevada, centeno, mijo, y sobre todo trigo….
El vino, por otra parte, es una riqueza que se exporta a Europa y a América:
Vino con que se provee Flandes, Inglaterra, Alemania, Indias Occidentales… aguardiente.
Se hace la boca agua leyendo la relación de frutas y verduras de España:
aceite, miel, cera,…excelentísimas frutas, melones de Invierno y Verano, vbas, higos, passas, almendras, melocotones, dureznos traídos de Persia, albaricoques de Armenia, membrillos de Candia, avellanas de Nápoles, guindas, cerezas…. nueces, peras, camuesas, manzanas, castañas, piñones, amacenas, aceitunas, arroz…Ciruelas, granadas, alcaparras, sandías, naranjas… cidras de Media, toronjas, limones, limas agrias, dulces, con semillas, legumbres, y verduras importantes para regalo de la vida. Y además, hierbas y flores:
Plantas aromáticas, yerbas medicinales, narcisos, violetas, açucenas, claveles, jazmines, rosas, flores de gran fragancia y recreación, otras útiles a varios vsos, como barrilla y sosa, de que se haze javón y vidrio.
De los árboles y bosques se saca:
leña, carbon y maderaje para embarcaciones.
Los aficionados a la caza y pesca de hoy suspirarán leyendo la antigua abundancia:
Caça Real, y ordinaria, javalies, osos, ciervos, corços, conejos, liebres, aves domesticas, campesinas, gallinas, capones, gansos, francolines, perdices.
Ay tambien buitres, garças, aguilas, cisnes, avecillas de agradables colores y suave musica. Preciados animalitos, ginetas rodadas, y negras, ardillas, almizcleras, fuinas, martas, vicerras, torones, y nutrias cuyos pellejos son bien estimados. Muchos estanques y lagos de pesca, fuera de la que dan sus mares….solo en el Océano Cantábrico se hallan 125 especies de pescados sabrosísimos conficionando multitud de escaveche. Riéganla mas de 150 ríos principales, clarísimos y transparentes llenos de truchas, barbos, anguilas,… con 700 puentes. Famosísimas fuentes… baños…
No podía faltar en la relación los minerales apetecidos desde la antigüedad por otras naciones:
riquísima de todos minerales… minas de açogue, açufres, estaño, plomo, açavache, alumbres, cobre, copiosas salinas, hierro, azero, de que se provee gran parte del mvundo:
La industria exportadora de los paños, lanas y sedas, que como veremos tanto preocupaba a los arbitristas del siglo, se describe aquí en pleno apogeo:
lo mismo de finos paños y lanas… importando [valiendo]cada año las que salen en ser mas de dos millones de ducados de plata, mucha seda, cuyo origen se dize traxeron los Moros, que solo en Granada, Toledo, Valencia, Cordoba y Murcia da de comer ordinariamente a vn millon de personas con su trato [elaboración y venta]… de la qual se labra riquísimas telas, brocados, la mas bordados, tafeis, terciopelos, damascos, tafetanes, rasos, terciopelos, tirelas, espolines, gorgaranes, picotes, y otras artificiosas labores. Por el mismo modo finos lienzos, de lino, que coge. Produce cañamo, algodón, que vino de la India Oriental…
Sigue la relación de lo que podíamos considerar vegetales reelaborados, y a continuación las piedras preciosas:
esparto, açafran, açucar traído de Sicilia, pez, resina, trementina, bermellón, rubia, grana, multitud de piedras preciosas, agatas, turquesas, jacintos, diamantes, esmeraldas, rubis, amatistas, calcedonias, cornerinas, granates, coral, cristales [deroca], mármoles, alabastros, jaspes…
Y las artesanías industriales:
hazese vidrio, y papel que compite con el Veneciano: finísimos barros [para cerámica], polvora: infinitas cosas que necesitan mas dellas las Provincias de Europa que ella [España] de otras…
Sobre el aspecto de los pueblos y ciudades y del ánimo de sus habitantes dice:
Sus habitaciones son en general populosisimas, y amenas: los edificios hermosos, y ricos, las gentes dispuestas, valientes, esforçadas hasta los vltimos alientos, agiles, ingeniosas en todas Artes superiores artifices,… Cria velocísimos cavallos,… mulas, machos y otros brutos…
La población llega a los 9 millones de habitantes en 30.000 poblaciones que tributan 30.000.000 de ducados. Los Duques, Marqueses, Condes y Vizcondes tienen una renta de 7.000.000. La Iglesia tiene 120.000 templos, 80.000 pilas de bautismo, 9.080 conventos de religiosos, 3.000 de monjas y 17 Tribunales del Santo Oficio. Las 7 Órdenes Militares en sus 922 Encomiendas valen 1.393.598 ducados; hay 11 Arzobispos y 55 obispos.
Después de este elogio general de España, Méndez Silva pasa al detalle de cada uno de los 19 Reinos que ha enumerado al principio. Da una descripción general de cada uno y luego describe la producción y méritos históricos de sus ciudades importantes, acompañadas de una relación de las fuentes bibliográficas o archivísticas de donde ha sacado sus datos.
b. Extremadura
En la parte de Extremadura, seguiremos igualmente satisfechos: Estuvo poblada por los Vetones, “gente Española”. Tiene siete ciudades, tres catedrales, famosas villas y lugares y las Órdenes Militares de Santiago y Alcántara. Extremadura es de las ricas y fértiles Regiones de España. Cría tan buen ganado que Juan I de Castilla permitió que se vendiera el buey del Guadiana 20 maravedíes más caro. Produce abundantemente pan, vino, azeyte, frutas, caças, aves, todo genero de legumbre, y hortaliza, aunque es algo destemplada en el calor: Sus gentes hablan la lengua Castellana, son dadas a la agricultura, algo altivas, y jactanciosas; apacibles en amistad, belicosas, fuertes y robustas. Da las diversas etimologías de la palabra Extremadura y pasa a enumerar sus ciudades.
A cada ciudad, villa y lugar le atribuye un origen, bien sea remoto por los Vetones, o los griegos, o los romanos, bien por los moros o los reconquistadores cristianos; incluso indica si la fundación es de tiempos recientes. Especula con la etimología de sus nombres, cita las fechas de sus repoblamientos, los nombres y hazañas de sus hijos ilustres (con cierta coba para los poderosos contemporáneos), sus escudos de armas, fortificaciones y situación geográfica.
Ahora a nosotros solamente nos interesa lo que Méndez dice que producen, el número de habitantes, y las instituciones religiosas, siendo digno de observarse como en casi todos los pueblos hay más de un convento y, a veces, un hospital. El dato es interesante porque una de las razones que se aducirán por los arbitristas será el excesivo número de frailes y monjas, que no tributan y contribuyen al descenso de la población.
Extractamos a Méndez:
Ciudades:
Mérida produce “mucho pan, vino, ganados, frutas, hortalizas, caças, aves y pesca: habitada de diez mil vecinos, tiene 3 parroquias, 3 conventos de frailes, 3 de monjas, un Hospital, 7 ermitas, y tiene jurisdicción sobre 14 villas y 13 aldeas; eclesiásticamente pertenece al Prior del Real convento de San Marcos de León, de la orden de Santiago y en lo seglar al Rey. Su iglesia metropolitana pasó a Santiago de Compostela a petición de Alfonso VIII.
Badajoz es plaza fuerte, habiendo sido sus murallas reedificadas en 1641 y 1642. Tiene 8 puertas, jardines, huertas, recreaciones; es fértil de pan, vino, aceite, ganados, en ellos gran trato de lanas, sabrosos quesos, aves, caças, frutas agrias, y dulces, y pesca: habitada de 2.300 vezinos… tiene 3 parroquias, 5 conventos de frailes,, 7 de monjas, 3 hospitales, 10 ermitas; haziendo mercado franco Martes de semana… Tiene jurisdicción sobre 6 aldeas. Además de hablar sobre su origen romano y moro, informa que el obispado tiene 53 pilas bautismales que le dan de renta al obispo 18.000 ducados.
Plasencia también es una ciudad fortificada con siete puertas, tiene fuentes de agua saludable, veintidós calles principales y dos mil vecinos, siete parroquias, 4 conventos de frailes, cinco de monjas, 7 ermitas, 5 hospitales, 2 colegios, 37 cofradías. Y lo mismo que las anteriores, es abundante de pan, vino, hortalizas, aves, etc. Haze dos Ferias cada año, primera dia de San Andres, 30 de Noviembre, segunda por el Corpus, y mercado franco Martes de Semana … Tiene 101 pilas bautismales que rentan al obispo 40.000 ducados.
La Vera de Plasencia, Deleitable y delicioso Valle… es sitio no solo de los mas fértiles de España, sino de toda Europa… ayres tranquilos, zefiros blandos, suave calma, y salutiferos Astros, son congruentes motivos para colocar aquí celebrados campos Eliseos, significando “lugar de vida bien venturada, habitación de los Dioses, y descanso de varones justos. Comprende 17 poblaciones que habitan cinco mil vecinos, cubierto todo de… castaños, nogales, avellanos, guindales, mançanos perales, ciruelos, limones, naranjos, limas, higos, membrillos, melocotones, duraznos, albaricoques… melones, olivares, viñas, sembrados, linares, huertas, jardines, y prados, abastece la mayor parte destos Reynos… cristalinas fuentes, copiosos arroyos llenos de sabrosas truchas; pues solo en Garganta de Valverde se pescan cada año mas de 500 arrobas… Xaraiz… veinte mil arrobas de vino, y azeite, venticinco mil fanegas de castaña… cien libras de fina seda. Cuacos, Garganta la Olla y Solana aportan 14.000 arrobas de aceite, 50.000 de vino y 70.000 fanegas de castaña. Xarandilla, 50.000 arrobas de vino y 27.000 fanegas de castaña. El Valle de Plasencia, desde el Puerto de Tornavacas, hasta la Ciudad, adornado en ambas partes de altas sierras… plantadas de frutales, regadas de risueños arroyuelos… En las orillas del Jerte, seis lugares son fecundos de miel, cera y otras comodidades.
Coria, regada por el Alagón tiene pesca, huertas y jardines, pan, vino, caza, aves y frutas. Tiene 700 vecinos, 2 parroquias, 1 convento de frailes, otro de monjas, 2 hospitales y 3 ermitas. Ferias en San Pedro, en San Andrés y en la Cruz de Mayo; mercado el Jueves. Tiene 31 pilas bautismales que rentan 26.000 ducados.
Trujillo: En lo eminente de un collado, cuya cumbre ocupa, fuerte castillo sobre peñas, yaze la Ciudad de Truxillo, con gran cosecha de pan, muchos ganados, y dellos finíssima lana, aves, caças , frutas y hortalizas; habitada de 1200 vezinos, Caballeros, Mayorazgos, y gente Noble; divididos, en seis parroquias, quatro Conventos de Frayles, seis de Monjas. Goviernanla Corregidor y Regidores, con diez y siete lugares de jurisdicción que tienen 4.300 moradores: haziendo Feria cada año primer jueves, passado quinze de May, otra veinticinco de Iulio, dia del Patron Santiago. Son sus Armas, la Imagen de Nuestra Señora con el Niño Iesus en braços, sobre los muros entre dos torres, tomòlas quando se ganó de Moros… por averse aparecido favoreciendo a los Cristianos. Fundóla Iulio Cesar, años quarenta y ocho antes de nuestra Redención, nombrándola “Turris Iulia”… Sigue diversas consideraciones sobre erróneas interpretaciones sobre la fundación de Trujillo, la Reconquista de la ciudad y las repoblaciones en 1232 y 1531. Hace el elogio del linaje de los Vargas, de los Pizarro, descendientes del Capitán en Navarra Gonzalo Pizarro y de doña Ines Yupante, hermana de Atabalipa, y de Diego García de Paredes. Finalmente recuerda que hubo una Orden militar de Trujillo, anterior a la de Alcántara.
Jerez (Xerez) de los Caballeros, como todas, es abundante de bastimentos; a los mercados de Llerena y Escalona lleva más de 50.000 caballos. Tiene 1.400 vecinos, 4 parroquias, 3 conventos de frailes, 6 de monjas y 6 ermitas; seis fuentes y en su campaña 366 y 2 aldeas; se repobló con gente de Galicia y Valle del Xerques; antiguamente se llamó Jerez de Badajoz; lo de Caballeros le vino por los Templarios. Carlos V, según dice, la elevó a ciudad.
Llerena, fértil de pan, vino, caza, etc. sobre todo ganado. Tiene 1.600 vecinos, 2 parroquias, 3 conventos de frailes, 4 de monjas; mercado franco los los Martes,donde acude tanta cantidad de pescado, que provee a gran parte de Extremadura; tiene 19 villas; depende de la provincia de León, de la Orden de Santiago; tiene tribunal de la Inquisición, mudado en 1516 a Plasencia, pero poco después volvió a Llerena. Los Pérez Correa descienden del troyano Eneas. La elevó a ciudad Felipe IV en 1640.
Medellín, fértil de pan, vino etc. tiene 800 vecinos, 4 parroquias, 1 convento de frailes, 2 de monjas, 4 ermitas, un Hospital y casa de niñas huérfanas; 10 aldeas con 2.700 vecinos en total. Feria en la Pascua de flores y el 1 de Mayo. Fundación romana, cuna de Fernando Cortés de Monroy, Marqués del Valle de Guaxaca.
Villas:
Villa de Feria, tiene dilatadas dehesas y 400 vecinos, 1 parroquia. Origen celtibérico de los Vetones; de Seria pasó a Feria.
Villa de Alburquerque: fértil de pan, vino, pesca, etc.; ganados en dilatadas dehesas, labra finos paños que provee a diversas partes; tiene 2.000 vecinos, 2 parroquias, 1 convento de frailes, 1 de monjas.
Villa y Santuario de Guadalupe: tiene 600 vecinos, abundancia de pan, vino, etc., 25 fuentes; los Jerónimos son dueños de la villa. Hay una enfermería, un Hospital para peregrinos, botica que hace de costas cada año 9.000 ducados; dos Colegios, gastando al día 1.500 raciones y por año 12.000 fanegas de trigo, 20.000 arrobas de vino, 7.000 cabezas de ganado, fuera de terneras, cabritos, y aves. Las rentas pasan de 28.000 ducados; el culto cuesta 240 marcos. Feria el 8 de Septiembre frecuentada por mercaderes.
Villa de Miravel, fértil de pan, vino regalado, etc. Tiene 350 vecinos, 1 parroquia.
Villa de Béjar: en apacible valle de su sierra cubierta de nieve que provee a varias partes de Extremadura. Caño de agua fría para beber y otro caliente para baño. Tiene grandes bosques, caza, pan, etc. Tiene 700 vecinos, 3 parroquias, 1 convento de frailes, 2 de monjas; 22 aldeas con 2.800 moradores; se despobló y Alfonso IX de Castilla la volvió a poblar.
Villa de Cáceres (todavía no era ciudad). Con mucho pan, pesca, ganados con finísima lana. Tiene 2.000 vecinos, 4 parroquias, dos conventos de frailes, 5 de monjas, buen Hospital.
Villa de Segura, llamada de León; fértil de ganados, caza y algún pan. Tiene 480 vecinos, 1 parroquia, 1 convento de frailes, 1 de monjas.
Villa de Montijo, abundante de pan, vino, ganados, etc., tiene 700 vecinos, 1 parroquia, 4 ermitas.
Villa Nueva de Barcarrota, o del Fresno, tiene abundancia de pan, ganados, grandes pastos y 500 vecinos, 2 parroquias, 1 convento de frailes.
Villa de Alcántara: fértil de pan, vino, etc.; tiene 1200 vecinos, 2 parroquias, 2 conventos de frailes y 2 de monjas. La orden militar de San Julián del Pereiro, luego llamada de Alcántara, tiene 38 encomiendas que rentan 248.114 ducados.
Villa de Talaveruela: fértil de mucho pan, ganados, etc., tiene 300 vecinos y 1 parroquia.
Villa de Zalamea de la Serena, de la Orden de Alcántara. Fértil de frutos de todo género, pan, vino, miel, legumbres y en especial ganados mayores y menores. Tiene 700 vecinos, haviendo tenido pocos años ha casi 1200 casas; tiene jurisdicción sobre las aldeas del Valle y la Higuera; un convento de franciscanos con tres cátedras de Teología Moral, Artes y Gramática; 1 monasterio de monjas, 3 ermitas, 2 hospitales; abundantes restos arqueológicos.
Villa de Belvis: en tierra montuosa, cría mucho ganado de cerda; tiene 200 vecinos, 1 parroquia, 1 convento de frailes, 2 de monjas y 5 aldeas con 600 moradores.
Villa de Almaraz, tiene dehesas con ganado, 600 vecinos, 1 parroquia.
Villa de Monroy, en tierra quebrada, produce fruta; tiene 180 vecinos y 1 parroquia.
Villa de Orellana la Vieja, fértil de pan, pesca, cría de ganado por dilatados pastos y un bosque con conejos; tiene 260 vecinos.
Villa de Fuente de Cantos: abundante de pan, ganados por muchos pastos y dehesas; tiene 600 vecinos, 1 parroquia y 1 convento de frailes.
Villa Nueva de la Serena, abundante de pan, vino y ganados. Tiene 800 vecinos, 18 pueblos; pertenece a la Orden de Alcántara; se llamó antes Aldea Nueva y de los Frailes.
Villa de Belalcázar: para unos es de Andalucía, para otros de Extremadura; produce mucho pan y ganados; tiene 1000 vecinos; pertenece a la Orden de Alcántara.
Villa de Azuaga: de la Orden de Santiago; produce pesca y abundante pan y ganados. Tiene 850 vecinos, 1 parroquia y 1 convento de frailes.
Villa de Reyna, de la Orden de Santiago, es abundante de pan, vino y cría de ganados; tiene 80 vecinos.
Villa de Zafra. Produce pan, ganados y caza; tiene 200 vecinos, 1 parroquia colegial, 2 conventos de frailes, 5 de monjas. Feria el 24 de Junio, otra en Febrero y otra el 29 de Septiembre, día de San Miguel, con mercado franco los Jueves. Abundan los mercaderes, plateros y los demás, tantos que la nombran Sevilla la Chica.
Villa de Montánchez (Montanches), de la Orden de Santiago, lugar sano y de buenas aguas, fértil de pan, vino, frutas y ganados, particularmente de cerda, adoba la mejor cecina de España. Tiene 300 vecinos y 1 parroquia.
Villa de Garrovilla, abundante de pan y vinos; tiene 100 vecinos, 1 parroquia, 2 ermitas.
Villa de Almendralejo: fertilísima en toda Extremadura, pues coge 100.000 fanegas de trigo y cebada, de que provee a varias partes; tiene 900 vecinos, 1 parroquia, 1 convento de monjas y 11 ermitas.
Villa del Arroyo de San Serván: abunda de pan, cría de ganado y pesca; tiene 450 vecinos, 1 parroquia, 6 ermitas y 1 Hospital, y los lugarejos de Perales y Cobillana.
Villa de Don Álvaro: fértil de ganados, frutas y legumbres; tiene 100 vecinos, 1 parroquia y 2 ermitas. Los privilegios que concedió don Álvaro de Luna llevaron al lugar a algunos circunvecinos.
Villa de Valverde: abundante de pan y ganados; tiene 240 vecinos, 1 parroquia y 6 ermitas.
Villa de Alange (Alhange): encomienda de Santiago, coge mucho pan y ganados; tiene 150 vecinos.
Villa Gonzalo: fértil de pan, ganado y caza; tiene 150 vecinos, 1 parroquia, 1 buen Hospital.
Villa de Almoharin: deleitosa y apacible, abundosa de pan, vino, caza y ganado; tiene 500 vecinos, 1 parroquia y 5 ermitas.
Villa de Alcuescar: con buena cosecha de pan y ganados; tiene 400 vecinos, 1 parroquia y 5 ermitas.
Villa de Salvaleón: abundante de pan y ganados, tiene 350 vecinos; de la Orden de Alcántara.
Villa de Salvatierra. Abundante de pan y ganados; tiene 400 vecinos, 1 parroquia y 1 convento de frailes. Labra copiosamente preciados barros colorados y dorados, los mas dinos de España, excepto Estremoz, y San Felices. De la orden de Alcántara.
Villa de la Puebla de la Calzada (Calçada): toda huertas y arboledas, sitio muy agradable y ameno, fértil de pan, vino, frutas, ganados y caza; tiene 300 vecinos, 1 parroquia y 3 ermitas, en la Calçada que va de Merida à Lisboa.
Villa de Lobón: abundante de pan, vino, pesca, ganados, caza y frutas; tiene 200 vecinos, 1 parroquia, 1 convento de frailes, 3 ermitas y un buen Hospital.
Villa de Granadilla: produce algo de pan, vino, aceite, ganados y mucha caza; tiene 400 vecinos.
Villa Franca: abundante de pan, vino, aceite, ganados, caza, aves y frutas, tiene 700 vecinos, 1 parroquia, 1 convento de monjas y un buen Hospital.
Villa de Hornachos: con abundancia de pan, ganados y caza; tiene 300 vecinos, 1 parroquia y 1 convento de frailes. En tiempos de los moros fue opulentísima. (Méndez silencia aquí a los moriscos, expulsados en 1609).
Lugares:
Lugar de Nava: es el mas sano sitio de Extremadura, llano, fertil de pan, y ganados; con cien vecinos, y vna Parroquia; se llama también “del Membrillo”.
Lugar de Cordobilla: abundante de pan y ganados; tiene 80 vecinos y 1 parroquia.
Lugar de Mirandilla: con abundancia de pan, vino y ganados; tiene 200 vecinos, 1 parroquia y 2 ermitas; hay un caño de agua que dicen es del tiempo de los romanos.
Lugar de Carmonita: con gran cosecha de pan, ganados; tiene 30 vecinos y 1 parroquia.
Lugar de Trujillanos (Truxillanos): fértil de pan, vino, caza y ganados; tiene 50 vecinos y 1 parroquia.
c. Análisis de la lectura de Méndez.
1- Fábricas: No hay referencias a fábricas concretas en Extremadura, salvo alguna alusión a la elaboración de paños de lana en Alburquerque y seda en Plasencia. Sin embargo, sí se cita elogiosamente los cacharros de fino barro producidos en la villa de Salvatierra y la cecina de Montánchez.
2- Comercio: No teniendo puertos marítimos, la salida de sus productos y su comercialización se haría por el puerto de Sevilla, pero la actividad mercantil y artesana es resaltada en Zafra, “Sevilla la Chica”, y la abundancia de mercaderes en Guadalupe. Sobre la distribución a otras partes, se cita los frutos del Valle del Jerte, los pescados de Llerena, el trigo de Almendralejo, los caballos de Jerez de los Caballeros y la nieve de Béjar.
Las Ferias que celebran muchos lugares son señalados con el día, o los días de su celebración; no se olvida de la de San Miguel en Zafra. Por otra parte, en casi todos los lugares, bien el Martes, bien el Jueves es día de mercado franco.
3- La Agricultura y la Ganadería: Abunda el pan, es decir, el trigo, y las frutas y legumbres en casi todos los sitios. En ocasiones se menciona la abundancia de pastos y dehesas para el ganado ovino y vacuno; raramente se cita al cerdo.
Los grandes propietarios son las Órdenes de Alcántara y Santiago, y también la Iglesia; a veces se dice que tal o cual lugar fue vendido por el Rey, para paliar sus estrecheces económicas, a los Nobles, (o a sus mujeres, caso de Lobón), quienes fueron aumentando sus tierras durante el siglo XVII, en el que hay un resurgir de los grandes señoríos latifundistas, mientras que el Rey se va quedando sin tierra y sin rentas.
4- El Ejército: La dispersión territorial del Imperio español forzaba a grandes gastos militares. Méndez da de efectivos militares 224.000 infantes y 87.290 caballos; de la Guarda de Castilla hay 19 compañías y las plazas de soldados son 70.000.
La guerra iniciada en 1640 por la sublevación del Duque de Braganza trajo a Extremadura, especialmente a Badajoz, una concentración de tropas mal mandadas y peor pagadas, que constituyeron una carga para la población. La soldadesca, al no recibir sus pagas, se convertía en partidas de ladrones ocasionales imposibles de disciplinar[6]. El Ejército propio parecía convertirse así en un ejército de ocupación que vivía sobre el terreno. No hay referencias en Méndez a este problema.
5- Despoblación: La emigración a América, las levas militares y la entrada en los conventos para asegurarse como frailes la comida y un relativo bienestar, eran una parte del descenso de la natalidad producido por la falta de esperanzas de los jóvenes de poder mantener a una familia. No parece, sin embargo, leyendo a Méndez, que hubiera este problema, salvo en el caso de Zalamea, donde Méndez reconoce el descenso de población, y de Hornachos, de la que dice que en tiempos de Moros era opulenta, pero no menciona a los abundantes Moriscos de Hornachos, expulsados en 1609.
6- Remesas de los emigrantes conquistadores: No hay referencias a que los que se habían ido a América y allí habían triunfado enviaran algo de dinero, oro o joyas a sus familias, aunque es evidente que la construcción de palacios, como el de los Pizarro en Trujillo, daría trabajo a parte de la población; otras donaciones, como oro, plata y piedras preciosas para los altares de las iglesias no producían riqueza local.
II. La visión pesimista de los arbitristas.
La decadencia económica y la despoblación no eran una situación aislada de Extremadura, sino la general de toda España, que, por otra parte, alcanzaba la cima de su esplendor artístico y literario (el Siglo de Oro) en el momento en que su influencia política internacional -todavía muy importante durante otro siglo más- y su poderío económico comenzaban un largo período de decadencia.
En contraste con la descripción optimista de Méndez Silva, un anónimo manuscrito satírico[7] describe la buena situación de los extranjeros en España, el que seamos la burla de Inglaterra, Francia y Holanda; la carestía general y el afán de sinecuras, todo dentro de un panorama caótico. A esta dolida descripción satírica, debemos añadir también el pesimismo de los “arbitristas” de la época, que nos pintan un panorama económico y social que no puede ser más desolador.
La palabra “arbitrista”, persona que propone remedios (arbitrios), tiene añadido un significado peyorativo por lo extravagante o ilusorio de muchas de sus propuestas. Fueron numerosos y presentaban sus soluciones cuasi milagrosas en forma de “Memoriales” generalmente dirigidos al Rey de turno. El análisis de estos “memoriales” ha llevado a los historiadores de la economía a establecer que no todos eran dislates, sino que en algunos de ellos se puede ver un descubrimiento o un atisbo de principios económicos sensatos que los economistas posteriores han aprovechado o redescubierto, de modo que merecen que se les llame “economistas” y no “arbitristas”.
Traigamos algunos ejemplos de cómo veían la situación económica de España, y por ende, de Extremadura:
1- Prosperidad antigua perdida: Prácticamente en todos hay una nostalgia por el siglo XVI como una época de prosperidad general de España asociada además a un aumento de la población:
Miguel Caxa de Leruela en su Restauración de la antigua abundancia de España[8] en contraste con la situación presente dice: “El grave peso de los tributos, es efecto de la falta de ganados porque la despoblación de los lugares y el alcance de los contribuyentes, haze que pague diez los que pagan [les tocaría pagar] ciento, y estos diez no tienen hazienda como tenían cuando auia ganados. En 1650 Francisco Martínez de Mata presenta un Memorial[9] en el que dice “Hace 80 años vivían de la seda y de la lana 200.000 personas cada una, más las del lino, etc….Hierro y madera, etc. las llevaban de España las naciones por mejor calidad y ley…[ahora] no recibe rentas Hacienda [por este concepto] y se pierde el saber hacer bien las cosas…Había familias, tiendas, oficiales, aprendices de chapinerías, borciguenerías, cuellos, calças enteras de obra, jubeteros, zapateros de lazo, ballesteros, guadameciles, pasamanos, y otros cosas… los lugares se despueblan, quedan las hijas sin casar…
Se permitió la entrada de géneros extranjeros en España, y en 1632 se estableció la venta de la recaudación de los tributos; los recaudadores miraban por su provecho y exprimían a los comerciantes. Enrique Lepin, representante de los comerciantes extranjeros que residían en Sevilla, se queja de que, contrariamente a lo que sucede ahora, antes de 1632: “Subían los baxeles cargados de mercancías hasta las puertas [de Sevilla] y bolvían a baxar con las lanas, azeytes y demas frutos de la tierra… En 1629 Peñalosa Mondragón pone de manifiesto la despoblación de España “para que meior se aduierta las causas del despueblo”[10]. En 1671 Pedro Díaz Márquez escribe un Memorial[11] en el que dice “Labrador, y ganadero que fui, y pobre de solemnidad que soi y natural y vezino de la Ciudad de Villena,” y que escribe por encargo de “la Iusticia y Regimiento de dicha Ciudad, viendo en la mucha pobreza en que se hallan sus vezinos, ocasionada de esteriles años, y de abundancia de tributos executados, y de la mayor miseria que esperan con no aver sembrado por falta de agua sus campos .Y pide al Rey una moratoria en los tributos: le haga gracia de perdonarle en todos sus debitos Reales retrasados de alcavalas, y de minorarles los corrientes”. Y aprovecha para recoger las ideas que había expuesto en otro Memorial suyo titulado Fábricas Reales con citas de los arbitristas anteriores sobre el exceso de cargas fiscales y de los recaudadores, las defraudaciones, la pérdida de valor de las monedas (por cierto, no menciona la falsificación de ellas en el Extranjero[12]) y el hecho de que el Patrimonio Real está empeñado; añade la antigua abundancia de la labranza, y de la caza y recalca, como otros tratadistas, el exceso de las pompas y lujos en los vestidos. La vena arbitrista le sale al proponer que se expulse a los Turcos de Constantinopla mediante soldados con una cruz en el pecho, lo que no viene a cuento pero que sí indica un rasgo de la mentalidad de la época.
2- Fábricas paradas: La riqueza general añorada se basaba en gran parte en las fábricas, especialmente de paños, que se extendían por Castilla. Las lanas de nuestras ovejas y las sedas aquí fabricadas eran de excelente calidad, daban de comer a productores, fabricantes y comerciantes; constituían además un capítulo importante de la exportación. Pero cuando se permitió a los extranjeros traer telas de menor calidad y por tanto más baratas, las fábricas propias se fueron cerrando y el dinero que con ellas se recibía dejó de afluir. También las fábricas de lino y cáñamo acabaron arruinándose. El oro y la plata que venían de América ya no eran suficientes para pagar los inmensos gastos de los ejércitos y virreyes españoles fuera de la península y además tampoco podían ya satisfacer la demanda interna de telas y lujos, que había ahora que importar.
Algunos de los “Memoriales” tratan de paliar la falta de recursos que llegan a la hacienda para pagar todos los gastos de la maquinaria del Estado: es el caso de Dramesa Arragoces que ya al comenzar el siglo XVII, en 1605, propone algunas soluciones a los gastos del ejército y la armada[13]; la penuria trae consigo la desprotección de nuestras costas, a lo que quiere poner remedio Murcia de la Llana[14]; el clero no pagaba impuestos y Murillo Jurado se atreve a proponer que se revise el status del Clero[15]. La situación económica es tan desesperada que hasta se propone (unos años antes de 1648) que se permita volver a los “hombres de negocios” de origen judío que habían huido de la Inquisición y se habían establecido fuera de España, para que traigan sus capitales, propuesta que no llegó a cuajar[16]. Por otra parte, estos conversos que judaizaban fuera, se convertían, en connivencia con los que se habían quedado, en espías de las entradas y salidas de barcos españoles y de sus cargamentos, con perjuicio para nuestro comercio.
3- Exportación-importación: Precisamente este capítulo de la falta de exportaciones y la abundancia de importaciones es uno de los puntos en que más insisten los arbitristas-economistas, que se preguntan por qué han cerrado las fábricas antaño boyantes. Martínez de Mera aduce a Damián de Olivares[17] quien afirmaba “de lo que hay en las tiendas, la mitad o más se ha fabricado fuera” y él añade “tierras yermas, ventas, cortijos, mesones, huertas, hornos, casas, tiendas, ciudades enteras empobrecidas o acabadas porque les pareció más barato o mejor lo extranjero… Cuando se fabricaba en España lo que en España se consumía había población y rentas reales”; se opone así explícitamente a Alcázar Arriaza[18], quien mantenía que la causa de la pobreza era la intolerable carga de los pechos y gabelas que había que pagar; Martínez de Mera le contradice, afirmando: “no es ese el verdadero punto sino la destrucción del comercio de las Artes [fábricas y artesanías] de la patria… Los oficios y los tratos es el principal sustento de la gente que consume lo que los labradores producen. Si faltan, todo se despuebla… [los extranjeros] se llevan ropa vieja, la remiendan y tiñen y la venden por nueva… Si se prohibieran los generos extranjeros vendrían a España a fabricarlos y quedaría en España el dinero que viene de las Indias”. A esto habría que añadir el contrabando. Ya finales del siglo XVII tanto el Gobernador de Cádiz, Francisco de Velasco, como el administrador general de las Rentas Reales, Pedro Núñez de Prado se quejan de la existencia de franceses que se dedican a meter de contrabando tejidos franceses traídos en barcos genoveses[19], que se envían a las Indias y “siendo los Generos que se embarcan para Yndias de Reynos estrangeros a de ir a ella el su torno que es la plata”.
4- Despoblación: La despoblación debía de resultar tan visible a ojos de todos, que es un punto en el que coinciden los “Memoriales”. A menos población, menos producción, menos comercio y menos recaudación de impuestos para la Real Hacienda. La expulsión de los Moriscos en 1609 fue considerada por algunos una de sus causas. Murcia de la Llana no llega a tomar partido sobre el asunto y se limita a decir “Otros dicen que la causa es la Expulsión de los Moriscos, porque con ella se arrancó la población, y fabrica de muchas Artes”, aunque para él es evidente que la causa ha sido la importación de géneros extranjeros de más bajo precio y calidad; incluso la impresión de libros españoles se hace fuera: “Y ay en esta Corte un Frances que solicita… para que le den los libros que se auian de imprimir en España, significándoles ser mejor y mas barato. Con lo qual se lleva gran suma de dineros a Leon [Lyon] de Francia, haziendo allá poderosos a los de este Arte, y acá acabando de destruir las familias que con esso viven”.
5- Desamparo de los viejos soldados: La relativa abundancia de memoriales de antiguos soldados y generales que se ven en la miseria y piden un socorro es una estampa más de la deprimente situación económica del momento[20].
III. Conclusión
Pensando en el “pan y cebolla” del labrador Sancho Panza, siempre hambriento, la austeridad con que come el hidalgo D. Quijote, y la abundancia de la mesa de los Duques que concedieron a Sancho la ínsula Barataria, podríamos concluir que el optimismo de Méndez y el pesimismo de los arbitristas reflejan dos realidades que coexistieron, pero a lo largo del siglo XVII acabó imponiéndose la pesimista.
NOTAS:
[1] Fernando Díaz Esteban “Miscelánea de documentos sobre Extremadura en la Real Biblioteca”, XXXI Coloquios Históricos de Extremadura, Trujillo 2002, Centro de Iniciativas y Turismo de Trujillo, 2003, pp. 163-177.
[2] Población General de España/ Sus trofeos, Blasones, / Y Conqvistas Heroicas. / Descripciones Agradables, Grandezas naturales, / Excelencias Gloriosas, / Y Svcessos Momorables. / Con Mvchas, Y Curiosas Noticias; / Flores cogidas en el estimable Iardin de la preciosa / antigüedad, / Reales Genealogías, y Catalogos de Dignidades/ Eclesiásticas, y Seglares / Por Rodrigo Mendez Sylva, Coronista Destos Reynos: / Añadida, y enmendada por el mismo en esta vltima impresión./ Dedicado al Señor D. Fernando Valenzvela, Cavallero/ del Orden de Santiago, &c/ Año [flor con Purísima]1675./ Con Privilegio/ En Madrid, Por Roque Rico de Miranda./ A costa de Juan Martín Merinero, Mercader de Libros. Vendese en su casa, en la Puerta del Sol.Folio. La primera edición es de 1645.
[3] F. Díaz Esteban “Los Campos Elíseos y Tubal en el judaizante Miguel de Barrios”, en P.M. Piñero Ramírez (editor), Dejar hablar a los textos. Homenaje a Francisco Márquez Villanueva, Universidad de Sevilla, 2005, p.725-737, donde cito otros trabajos míos relacionados con el tema.
[4] La devoción de los peregrinos centroueropeos a Santiago puede verse en la selección de sus relatos realizada por Klaus Herbers y Robert Plötz, Caminaron a Santiago. Relatos de peregrinos al “fin del mundo”, traducción de José Reimóndez Fernández, Xunta de Galicia, 1999. Para los peregrinos pobres, había desde la Edad Media albergues y ayudas. Sus opiniones, sobre todo del País Vasco, no siempre son halagüeñas.
[5] En el siglo XVI una relación manuscrita de las provincias (en el sentido de regiones) divide a Extremadura en la Provincia de Trujillo (Cáceres y Badajoz) y la Provincia de León de la Orden de Santiago (que incluye Llerena, Jerez de Badajoz y Mérida). F. Díaz Esteban, “I. Apéndice a la Inscripción de Rabí Isaac. II. La Provincia de Trujillo en el siglo XVI”, en Actas del Congreso sobre Trujillo Desde el Barroco al Neoclasicismo, 2003, Real Academia de Extremadura (en prensa).
[6] Sobre la situación caótica del Ejército, véase F. Díaz Esteban, “La estancia de la última virreina de Portugal en Badajoz”, XXXII Coloquios históricos de Extramadura, Trujillo, CIT, 2003, p. 191-201.
[7] Discurso incierto q. un astrologo inga (inca) uio sobre los nuevos duendes del Retiro, Real Biblioteca de Palacio, II/1431, fol. 477.
[8] Madrid, I parte, cap. 22.
[9] Memorial en razon de la Despoblación probreza de España, y su remedio de Francisco Martínez de mata, natural de Motril… al Reyno junto en Cortes, Madrid, 8 de Noviembre de 1650. Para este y otros memoriales suyos véase Gonzalo Anes y Álvarez de Castrillón, Martínez de Mata, Madrid, 1976.
[10] Benito Peñalosa y Mondragón (O.S.B.), Libro de las cinco excelencias del español… para que meior se aduierta las causas del despueblo en España para que… se habiten, Pamplona, Carlos Labayen, 1629.
[11] Catolico Señor.I. Sol. Padre de los Pobres.II Y de todos vuestros Vassallos en general, y Pastor, Villena, 16 de Junio; el memorial anterior llamado VII Fabricas Reales se entregó el 11 de Mayo de 1671.
[12] Ya en tiempos de Felipe III, en la correspondencia que mantiene con D. Diego Sarmiento de Acuña, Conde de Gondomar, su Embajador en Londres, se habla de la falsificación holandesa de doblones. (Real Biblioteca de Palacio, II /1829).
[13] Juan Dramesa Arragoces, [Memorial para que la Real Hacienda se incremente], Valladolid?, 1605.
[14] Francisco Murcia de la Llana, Memorial para asegurar las costas del reino, s.l., s.a.
[15] Tomás Murillo Jurado, Memorial de reformacion de estados para que V. Magd. tenga muchos aumentos, ¿después de 1650?
[16] F. Díaz Esteban, El frustrado retorno de los judíos en el siglo XVII: nuevos documentos, Madrid, Real Academia de la Historia, 2004.
[17] Memorial presentado en Julio de 1620 y Octubre de 1621 por los daños que causaba la entrada de lanas y sedas fabricadas fuera.
[18] Jacinto de Alcaçar y Arriaza, Medios Políticos para el remedio vnico y vniversal de España, Madrid, 1646, y Nueua declaración… para extinguir los tributos, Madrid, 1646.
[19] Real Biblioteca de Palacio II/2841, fol. 19-33.
[20] Sirvan de ejemplo el de Enrique Benavides Bazán, hacia 1660, y el del noble García de Toledo Ossorio Marqués de Villafranca en 1645.